Tratamiento reductor y/o anticelulítico

Tratamiento reductor-anticelulítico:

Si bien la promoción de la belleza es moda, especialistas advierten acerca de la importancia de incitar a una belleza natural. Un tratamiento permite liberar grasas que son procesadas por el organismo a través de un proceso metabólico y fisiológico.

Terapias como la cavitación, se trata de un tratamiento ultrasonido, que produce efecto de cavitación: un fenómeno físico que provoca la creación repetida de micro burbujas de vacío de gran tamaño, lo que conlleva la rotura de las membranas celulares de los adipositos -células grasas- permitiendo la liberación del contenido de los mismos -triglicéridos y otras sustancias- pero protegiendo a las células fibrosas musculares.

¿Cuál es el concepto?

Estas grasas liberadas son procesadas por el organismo a través de un proceso metabólico y fisiológico natural, y luego, el proceso de sus desechos derivados, serán evacuados por vías linfáticas – venosas y eliminados finalmente con la orina.

Este tratamiento es el único que consigue eliminar grasa a nivel celular de forma práctica y segura, evitando su reproducción inmediata. La grasa se elimina fácilmente mediante el sistema linfático y luego sus desechos por orina. Este método, combinado con otras terapias: presoterapia, vacuumterapia, mesoterapia… y masaje, garantiza un tratamiento sumamente efectivo mejorando y recuperando el aspecto de la piel en la zona tratada.

¿Por qué se recomienda este tratamiento?

Se trata de un procedimiento no invasivo, indoloro, y no requiere anestesia. La persona no sufrirá hematomas, y puede continuar con sus actividades de manera normal sin tiene efectos secundarios. El equipo de última generación utilizado es capaz de garantizar resultados para modelar la figura y eliminar la celulitis de manera segura, eficaz y duradera; en condiciones adecuadas y controladas.

¿Cómo funciona?

Se trabaja sobre el espesor del pliegue graso aplicando en zonas donde exista adiposidad localizada y celulitis compacta (abdomen, flancos, muslos, cartucheras). Después de su aplicación es importante realizar un drenaje linfático, para eliminar toda la adiposidad que movilizamos. También es importante que el cliente beba abundante agua antes y después de cada sesión (entre 1.5 y 2 litros diarios como mínimo) y realice algún tipo de actividad aeróbica. Ambos recursos favorecen los efectos del tratamiento y la eliminación de los desechos.

¿Qué variables adicionales hay que tener en cuenta?

Si bien la eficacia del tratamiento está ampliamente demostrada, se aconseja que siempre se acompañe de alimentación balanceada y sostenida y actividad física regular, durante y después de todo el proceso, para lograr la máxima efectividad. Se recomienda realizar previamente un repaso sobre el historial médico del cliente, para asegurar las condiciones del paciente.

¿Existen contraindicaciones?

Es importante no perder de vista que existen ciertas circunstancias en donde se encuentra contraindicado. No pueden realizarlo mujeres embarazadas o con lactancia, personas que tengan alguna prótesis en la zona a tratar, con epilepsia, marcapasos, obesidad generalizada marcada, hígado graso, trastornos lipídicos (principalmente con elevaciones de triglicéridos o colesterol), o que posean alguna infección o cáncer no controladas.